Ayer, la Navidad de Madrid volvió a llenarse de perrillos; la Sanperrestre celebró su décima edición. Volvimos a disfrutar un año más de la emoción de estar rodeados de cientos de pequeños, muchos de ellos con divertidos atuendos navideños, pudimos bailar con ellos y comernos las uvas y las bolitas de pienso para pedir nuestros deseos para 2023, al ritmo de nuestras campanadas Sanperrestrianas.
Ayer volvimos a casa con el corazón lleno de amor, y con la emoción de haber pasado la mañana junto a tantas personas comprometidas, que quisieron ponerse en marcha contra el abandono de animales. A todas, nuestro cariño incondicionaly nuestro agradecimiento infinito.
Quienes formamos el equipo de El Refugio, os deseamos que despidáis el año con mucha alegría y que el 2023 nos permita disfrutar junto a nuestros pequeños de las cosas buenas de la vida, que son muchas.
¡¡Abrazos, salud, y muuucha Vida!!