Recibimos el aviso de una podenquita en muy mal estado, supuestamente por haber sido atropellada en Quintanar de la Orden (Toledo). Dos chavales que jugaban por la zona, la encontraron y avisaron a un veterinario del pueblo, quien a su vez avisó a unas chicas que habitualmente suelen ayudar a perretes en apuros. Finalmente fueron ellas las que contactaron con El Refugio.
Cuando la recogimos, pudimos comprobar que tenía múltiples fracturas, así como varias heridas abiertas de consideración, y una gran debilidad debido a la delgadez extrema; no olvidemos que la perrilla pudo haber pasado sola, herida, sin comida ni agua, durante unos 3 días.
Ya le hemos practicado dos intervenciones, y cuando se recupere un poco, habrá que realizar al menos una más.
Lo más importante es que ha ido reaccionando bien a las intervenciones, ha recuperado mucha fuerza y de ánimo se encuentra muy bien. Así que, con un poquito de paciencia y mucho amor, esperamos su completa recuperación para empezar a buscar una familia que la quiera adoptar.
La hemos llamado "Perrita Durango". Os seguiremos informando sobre su recuperación.
¡Bienvenida a casa!
