No podemos comenzar esta publicación sin manifestar el profundo dolor que nos produce tener que hacerla. Como personas sensibles que amamos y respetamos a los animales, resulta muy duro constatar que, con relativa frecuencia, la Guardia Civil desmantela lugares horrorosos en los que se producen de forma sistemática, delitos de maltrato grave a cientos, o miles de animales. Cada vez que somos conocedores de este tipo de casos, lo primero que sentimos es un inmenso dolor por todos los pequeños inocentes que han sido torturados, muchos de ellos hasta encontrar la muerte. El segundo sentimiento es de indignación, de rabia, de ira incluso, por el hecho de que este tipo de holocaustos animales sigan produciéndose en nuestro país. También a veces llegamos a sentir asco por pertenecer a una especie, el ser humano, que alberga a demasiados monstruos capaces de someter a los animales a semejantes torturas. Es repugnante.
Una vez que conseguimos recomponernos de toda esta montaña rusa de sentimientos poco evitables, el primer sentimiento que aflora es el de alivio, al ver que las fuerzas del orden han conseguido, una vez más, detectar y desmantelar un importante foco de maltrato, deteniendo a los presuntos responsables para que sean investigados y juzgados por los delitos que hayan podido cometer. Creemos que es algo de lo que tod@s debemos sentirnos orgullosos.
El siguiente sentimiento que experimentamos es de reacción, de movernos a la acción- Y eso es lo que una vez más acabamos de hacer: El Refugio se ha presentado como acusación en la causa abierta contra el presunto responsable de la muerte de 250 animales (la gran mayoría perros, según informa la Guardia Civil), Encuentran también a otros 171 animales vivos en condiciones de salubridad extremadamente deficientes, suponiendo un grave riesgo para sus vidas. Ocurre en Ordes, A Coruña, donde se ubicaba un centro clandestino de cría de animales.
Los supervivientes convivían con cadáveres en diversos estados de descomposición, algunos incluso momificados. Ante la falta de alimentos y agua, se vieron obligados a alimentarse de los restos cadavéricos. Los espacios que ocupaban los pequeños, estaban totalmente cubiertos de excrementos.
Entre los animales incautados había también ejemplares de distintas especies protegidas. En el transcurso de la inspección, la Guardia Civil también localizó un gran acopio de medicamentos y material veterinario de uso profesional que se encontraba sin receta y, en gran medida, caducado.
Por todos estos hechos, el Seprona de A Coruña ha instruido diligencias por los presuntos delitos de maltrato animal, posesión ilícita de especies protegidas, e intrusismo profesional en el ámbito de veterinaria. Las diligencias, junto con el detenido, han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Ordes.
Desde El Refugio, como siempre que nos personamos en una causa de maltrato, vamos a dedicar toda nuestra energía y recursos para ayudar a conseguir que este individuo sea condenado con la pena máxima contemplada por el Código Penal, por los presuntos delitos por los que está siendo investigado. Te iremos informando.
También queremos reiterar nuestro agradecimiento a todas las personas que colaboráis de forma permanente con la labor de El Refugio, haciendo posible que podamos seguir personándonos en todas las causas de maltrato de las que somos conscientes. De corazón: ¡¡gracias!!
En este vídeo puedes ver al investigado declarando ante la Jueza del Juzgado de Guardia al que fue trasladado tras su detención, y a Nacho Paunero relatando el resumen del caso.
¡¡Abrazos, salud, y un poco de Justicia!!