Hace tan sólo dos semanas, presentamos nuestro Proyecto AMPARO, y te presentamos a “Niña”, la primera perrita que acogemos dentro de este programa de ayuda para personas sin hogar a quienes el Ayuntamiento de Madrid no da acceso a sus albergues municipales, si van acompañados de sus pequeños. Un hecho que, desde El Refugio, nos parece grave, preocupante, y muy triste.
Cuando Pilar vio la historia de Niña y su familia en las redes sociales, nos contactó inmediatamente para ofrecerle a la pequeña su hogar, y su corazón. Al llegar a nuestro centro de adopción para encontrarse con Niña, hemos tenido el inmenso placer de conocer a una mujer sencilla, sincera, amorosa, y extremadamente generosa. Desde hace años ha venido adoptando a perritos muy mayores, para darles la oportunidad de poner un broche de oro a sus vidas, disfrutando de los mejores cuidados y un amor inagotable. Nos confesaba que se encontraba más sensible de lo habitual porque le ha tocado vivir varias pérdidas importantes, y superar una complicación de salud. Pero las adversidades no han conseguido que el desánimo haya echado raíces en ella, y aquí la tenéis, implicándose al máximo tanto con la pequeña Niña, como con la familia que se ha visto obligada a separarse de ella. “Lo hago por la perrita, pero lo hago por ellos”, nos dijo con honda emoción.
Desde el primer momento Niña se mostró muy relajada en su compañía, pero estaba muy pendiente de todas las personas que estábamos a su alrededor. Nos miraba a todos con gesto serio, como intentando comprender lo que estaba sucediendo, o a punto de suceder. Tras compartir un largo y agradable rato en el que pudimos hablar de muchas cosas, hacer unas fotos preciosas y grabar un vídeo que podrás ver al final de esta publicación, nos dirigimos hacia su coche para despedirlas y verlas partir camino hacia su nueva vida. Fue en el momento en el que colocamos a la pequeña en el asiento trasero y le pusimos el cinturón de seguridad, cuando Niña cambió su semblante por completo y comenzó a sonreír como se ve aquí. Ahora sí que había comprendido que se iba definitivamente con Pilar, cosa que parecía gustarle bastante…
Y la historia de cualquier adopción, no puede tener un final más feliz que el que vas a ver en la siguiente fotografía; la que hizo Pilar al llegar a su casa, retratando el momento en el que Niña se encuentra con Tara, la mastina que ya compartía vida con Pilar, y que a partir de ahora es su hermana.
“Todas las adopciones son muy emotivas, pero la adopción de “Niña” lo ha sido especialmente. Ahora mismo tenemos sentimientos enfrentados. Siempre reconforta saber que estás aportando ayuda en una situación tan sumamente delicada como la que estaban viviendo Niña y su anterior familia pero, por otra parte, sentimos que es muy injusto que hayan tenido que separarse de su pequeña, con la que han compartido 16 años de vida, para poder eludir el peligro que suponía para los tres continuar durmiendo en la calle. Sería mucho mejor, y más fácil, que el Ayuntamiento de Madrid diese “acceso real” a los albergues municipales, a las personas sin hogar que conviven con animales. Esperamos y deseamos que esta realidad cambie, y no sea necesario que el Proyecto AMPARO siga funcionando. Nos haría muy felices a mucha gente”. Nacho Paunero, Presidente de El Refugio.
Pinchando en la siguiente imagen, podrás ver el vídeo del momento de la adopción. Pilar ha dedicado unas cariñosas y emotivas palabras a la familia de Niña, para trasladarles que dará a la pequeña todo el amor y cuidados del mundo. Es posible que todo el amor del mundo esté contenido en este vídeo. No dejes de verlo, rebosa esperanza. Quizás el ser humano aún no esté del todo perdido…
¡¡Abrazos, salud, y siempre amparo!!