A las 12’15 h. del día 30 de noviembre, una patrulla de la Guardia Civil de Carballedo y Taboada (Lugo), acude al kilómetro 58 de la carretera nacional 540 a la altura de la localidad de Chantada, tras recibir el aviso de una persona que circulaban en coche por dicha vía. El testigo observa un animal que cruza la carretera, lo que le obliga a aminorar la marcha. Inmediatamente oye la detonación y observa un perro que da vueltas en el suelo, en el margen izquierdo según su rumbo, y que el animal está herido.
Detiene el coche y observa a un hombre con una escopeta en la mano, le pregunta por lo que ha hecho y éste responde “que es cazador, que el perro estaba abandonado y que llevaba 15 días por allí”. El autor se va a dejar la escopeta y vuelve con un cordón de atar pacas de hierba y el mástil de un pastor eléctrico, atando al perro y arrastrándolo a lo largo de unos 200 metros, hecho que el testigo le recrimina y graba con su móvil.
Según consta en el atestado de la Guardia Civil, “llegados los agentes al lugar de los hechos, comprueban que hay una perrita que permanece tumbada en la hierba. Una perra de tamaño mediano con una herida de proyectil en las patas traseras, de la que emana abundante sangre”.
Una vez identificado el supuesto autor, Héctor C.V.G., éste admite que disparó al animal con una escopeta y que en un cobertizo cercano de su propiedad se encontraba una camada de cachorros. La guardia civil interviene al autor de los hechos una escopeta marca BENELLI que guardada en el maletero de su turismo. Le comunica que será investigado por un supuesto delito de maltrato animal y que el arma será depositada en la intervención de armas de la Guardia Civil.
El informe veterinario refleja que encuentran a la perra postrada pero consciente en el lugar de los hechos, con graves heridas en ambos miembros torácicos. Es sedada y trasladada a la clínica donde confirman la gravedad de las lesiones, con aumento de densidad radiográfica en tórax cráneo-ventral con pérdida de detalle de la silueta cardiaca craneal.
Finalmente, debido a la gravedad de las lesiones producidas por el disparo, la perra ha fallecido. Los cachorros son 4 hembras y dos machos de menos de 2 kilogramos de peso, y se encuentran en buen estado de salud.
La protectora El Refugio se ha personado como acusación en la causa contra Héctor C.V.G. (autor de los hechos), solicitando la aplicación de medidas cautelares. Otro cazador más al que llevamos al juzgado por un presunto delito de maltrato animal y para el que pediremos la máxima condena contemplada en el actual Código Penal.
“Desde la justicia, hay que poner fin a la posibilidad de que haya personas armadas que se crean en derecho a disparar contra lo que quieran, en el momento que deseen, por el solo hecho de ser cazador. Es imprescindible un endurecimiento de las penas para este tipo de delitos y no pararemos hasta lograrlo”. Nacho Paunero, Presidente de El Refugio.