Estas imágenes helaron el corazón de todas las personas que amamos a los animales. Corría el año 2019 y la perrita “Alma” yacía medio moribunda tras haber sido tiroteada y arrastrada 200 metros por ese cruel individuo. La única culpa de aquella pequeña fue haber parido a su camada de cachorros en un cobertizo cercano a la vivienda de su agresor. Al parecer, a él le molestaba su presencia y, ni corto, ni perezoso, dio rienda suelta a su odio haciendo como lo hacen los más violentos: tirando de escopeta. Le pegó un tiro a la pequeña, y le ató una cuerda al cuello para arrastrarla hasta su propiedad con la intención de rematarla allí.
La casualidad quiso que una pareja que circulaba por el lugar con su vehículo, viera los hechos y parasen para grabar lo que estaba haciendo este individuo, y reprenderlo por ello. Gracias a ellos, el tipo no pudo cumplir el macabro fin de rematarla, y también gracias a las imágenes que grabaron, desde El Refugio pudimos denunciar los hechos y presentarnos como acusación popular contra él. Lo peor fue que, a pesar de la atención veterinaria de urgencia, la pequeña “Alma” no pudo salvar su vida.
La espera ha sido larga: cinco largos años para poder ver a este tipo sentado en el banquillo de los acusados para ser juzgado por la atrocidad que cometió. El 13 de junio estaremos en el Juzgado Nº 1 de lo Penal de Lugo para documentar el proceso y poder contarte si finalmente conseguimos que este “ser” sea condenado a pena de prisión por un delito de maltrato a animal doméstico; se lo debemos a la pobre perrita “Alma” y a los miles de animales inocentes que cada año son abandonados, torturados, y matados en nuestro país).
¡¡Abrazos, salud, y un poquito de Justicia!!